domingo, 11 de julio de 2010

CORDOBA, CORDOBA, CORDOBA!!


Una vez más Córdoba de mis amores; porque me es necesario venir a verte, a olerte, a sentirte...porque en esta ciudad se carga la batería de este móvil que es templetillo, que a veces comunica, pierde la cobertura y se queda out. Benditos calores de julio en esta ciudad, porque aunque el sol y el bochorno colonicen el día y la noche cordobesa, siempre queda el respiro del salmorejo fresco y del agua de tus fuentes. Y una vez más, San Rafael se ha bajado de su triunfo frente a la mezquita y echando su brazo por mi hombro me ha dado confianza y consuelo, y mi Virgen de los Dolores ha extendido su mano y me ha prestado su pañuelo para secar alguna lágrima, que a veces es imposible evitar que escape. Y el blanco de la judería se hace más albo, más grandioso, y aunque azahares y bugambillas hayan ido desapareciendo, todavía el aroma cordobés impregna mi corazón y mis sentidos. Al tiempo, sigo pensando en "la boda de mi mejor amigo", que está a punto de un pequeño detalle sin importancia, pero con todo preparado, todo organizado. Y sigo andando por Deanes, mirando para atrás la torre de la Seo cordobesa, que iluminada, se convierte en el faro de belleza y reencuentro de este templetillo, que una vez más firma su contrato de adopción con esta ciudad, con sus buenas gentes y sus tradiciones. Y quien sabe si alguna vez sea ésta mi morada, mi sitio y mi lugar, quién sabe...

4 comentarios:

  1. Desde luego..., ya te vale. Siempre quejándote pero siempre por ahí. (Es pura envidia) Córdoba me encantó, con su judería, su Catedral-Mezquita, su Alcázar... Disfrútala y disfrútate, que no te conoces...
    Besos
    The Best Moma

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  2. Córdoba, perdona por serte infiel, perdóname por no ser un Antonio Gala, manchego enamorado de tí.

    Seguramente nunca haya podido vivirte en todo tu duende, de noches en la Judería, de damas de noche, subir al camino de las Hermitas, irme al colegio de la Salle donde sirvió a Dios mi tio-abuelo.
    El tiempo lo quiso asi,te engaño una y mil veces con Sevilla la llana, con Granada fruta deshecha en mi paladar.

    Me hubiera gustado verte, en tu época Califal, en que llegaste a ser capital del mundo.
    Córdoba de la noria grande, con cangilones de lata.
    Córdoba de mi Ana, maltratada por la vida aqui, regreso a ti desconsolada. Sin consuelo sin esperanza, solo Dolores...
    Cordoba, de un niña muy guapa que aun perteneciéndote, siendo tuya, lleva por nombre Virtudes, el de mi madre torera.
    Córdoba del arrabal de las Palmeras, de compañeros de servicio militar, que aun metidos en el fango, siendo Lazarillos del Guadalquivir, pícaros del s XX, que me mostraron su honestidad.

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  3. Qué recuerdos... Córdoba, la rica en todo, la reina mora de la sabiduría y el buen vivir. De allí era mi santo, el pobre, que por defender aquello en lo que creía fue el primero en morir en el Campo de los Mártires, junto al Alcázar. Lo cierto es que fue un poquito chota, porque bajar a la mezquita a decirles a los moros lo que las perlas que les soltó por su boquita... por nadie pase!! Saludos. Gúmer

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  4. Decir Córdoba, es decir Dolores, no debemos de olvidarnos que Córdoba la eterna siempre es y sera ¡Dolores!. Dolores en las penas Dolores en las alegrías Dolores en familia, Dolores, Dolores, Dolores.

    San Rafael el Cutodio, Vigilante y atento a cualquier llamada, La Fuensanta La Copatrona ¿olvida? ¡NO! simplemente estamos en Córdoba y no se sabe valorar nuestras raices y nuestras tradiciones, pero ella es Reina sin duda en sus antiguas huertas y en la Córdoba llana y morena, Aciclo y Victoria sus Patrones, Martires Códobeses jovenes y de una misma familia. Olvidados ¡NO! inecistentes para muchos, pero vivo par muchos, ejemplo de verdad, piedra firmen en la Iglesia de Códoba, espejo donde mirarnos día a día. En el lugar donde fueron sacrificados por defender la verdad, la verdad de toda una Iglesia, la verdad de estar combencidos del amor de Dios. Podemos acercarnos a diario a pedir sus rogativas por esta bendita Tierra.

    Pero para rezar, rogar, rezar, pedir, dar gracias buscarte a ti mmismo, evadirte de la rutina diaria, encontrar tu propia identida y sobre todo pasar un rato emvuelto en la presencia de la Virgen. Siempre tendremos que ir a las plantas de la Señora Dolorosa de Córdoba, nuestra Señora de los Dolores la Dama de San Jacinto. Que sin ser Patrona, "si" que es Reina, MADRE, ESPOSA, HIJA y vida VIVA en la Ciudad, por ello y por razones de peso ella es sin duda la Dama de Córdoba la Señora y la dueña de nuestros corazones.

    Dolor Calmado

    Córdoba es Dolores y en San Jacinto, Dolor en Capuchinosy Señora de CÓRDOBA.

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