Porque cruje. Como a veces crujen los huesos, los días e incluso el alma. El rabo del marrano, del cochino, que se trocea y luego se cuece, para culminar en un corto frito en aceite de oliva, caliente, muy caliente.
Dice un amigo mío que lo peculiar de la gastronomía de Albacete es la "tortilla en caldo", puede que sea así, pero creo que el rabo frito también tiene patente de esta ciudad y sus alrededores. La sensación al morder la piel crujiente, que se mezcla con la carne interior, más suave, casi gelatinosa, que se cuela entre los dientes, a veces mientras se estira, como una especie de chikle de orza.
Unos prefieren la puntica. Otros los pequeños y cilíndricos trozos. Y esos huesos que se deshilachan del tronco de cada trozo, haciendo jugar a nuestra boca y lengua para esquivarlos y tirarlos, mientras seguimos degustando la especial combinación de esta parte del cerdo, del que dice el refrán, que "hasta los andares".
Un poco de limón. Un poco de pan. Una cerveza fresca. Una buena compañía...¿quien dijo colesterol?
y un platico de rabo. Otro día hablaremos del rabo de toro, exquisitez cordobesa.
Y recordar que hay muchos, muchos cerdos sueltos, con y sin rabo. Y a algunos habría que freírlos para que no nos frían a los demás. O por lo menos ya que no se pueden las orejas, cortarles el rabo. Ya lo sé, tengo mucho carácter, así me va pero soy como soy y es que ando un poco "frito"...
los rabos, a los extrajeron, de primeras lo repelen y no lo prueban, cuando los deleitan. Repiten!.
ResponderEliminarLo digo por saberlo y haberlo vivido.
¡hablo del rabo de Toro de estas tierras, Cordobesas. Que es uno de los platos, junto al salmorejo y alguno mas, que la vecina y hermana Sevilla, se quiere adueñar de estos platos!.
A propósito de esto. Comparto esto otro.
¡Que cosas tiene Sevilla!
Sevilla tiene de tó
tiene una torre del oro, que no es de oro.
Tiene una romería del Rocío en Huelva.
Tiene unos langostinos y una manzanilla en SanLúcar.
Un pescaito frito y unas playas en el puerto de Santa María.
¡Sevilla se atreve a tener!
Una Alhambra en Graná.
Una Mezquita en Córdoba.
Y un Cristo de los faroles, en la plaza de capuchinos (Córdoba).
Y un río Guadalquivir (ese si que es de Sevilla).
Pero nace en Cazorla. (Jaén), pasa por Córdoba.
Las guapas se quedan en Córdoba y las feas, se tiran al río y salen graciosas en Sevilla.
¡Que cosas tiene Sevilla!
Y ahora el Salmorejo, Cordobés, lo quieren hacer tapa Sevillana ¡no!.
El menudillo ese si que es de Sevilla, o los soldaditos de pavía, ¡estas tapas si son de Sevilla. A la que adoró y me gusta todo lo suyo, ¡pero lo de Sevilla!, no lo que con su gracia y arte, se apoderan los Listillos de turno.
Sevilla tiene tanto y tanto arte, que no le hace falta ningún añadido.
Amo Sevilla y a Córdoba, mi ciudad.....
Buen día.
La frase del día
ResponderEliminarLa vida en el cielo no consiste en tocar el arpa en una nube lejana; se asemeja mucho a la vida terrena, sólo que con mayor abundancia de felicidad y belleza.
Buen día....
En cuanto llegue a Chinchilla me voy al Dalia a pedir un platico de rabo y las típicas bravas de allí, que sueño con ellas...
ResponderEliminarBuenos días.
Ah! La Meriyou no puede escribir desde Chinchilla porque se conecta con la tablet y no le deja escribir los comentarios. Así que, hasta que no vuelva a Madrid, me temo que no habrá nada de ella. Una pena.
Ves, esto si que me gusta....aunque me tenga que tomar un almax, es una de mis tapas favoritas....pero si no está bien hecho mal asunto, hay que saber dónde lo ponen bueno, que si no parece que estás comiendo chicle....
ResponderEliminarLa Polo
Me encanta, a ver cuando me llevas a comer.. un beso!
ResponderEliminarGotta love piggies tail!
ResponderEliminarBuena receta , expuesta a el resto de las provincias para que al hacerla se unan , a la que le ha dado luz para gozo nuestro y de los que nos acompañen en esta vianda albaceteña.
ResponderEliminarGracias por compartirla y tan bien explicada.