LOS CHORROS

Han reventado. Porque no ha parado de llover ni de nevar. La cueva donde nace el río Mundo ¡curioso nombre! y es que a veces todo el mundo cabe en un río, se ha llenado y desbordado, como hacía años no pasaba, porque la física tiene unas leyes y cuando se cumplen, pasa lo que pasa.
    Reventón de las aguas serranas. Porque el agua es vida, y más después de un año tan seco como el pasado. Porque parece que está lloviendo lo del año pasado y lo de este; y es que a veces las cosas no se compensan y se produce un empacho, como el que tenemos estos días de suelos mojados y cielos grises.
      Muchas personas desconocen que en esta provincia desconocida, haya parajes tan impresionantes, tan de montaña, con tanta agua. Porque estas tierras no son sólo páramo y llanura, al igual que las personas no son solamente lo que vemos por fuera, lo que percibimos; siempre hay más, y sobre todo bellezas ocultas. Me encanta Riópar, Fábricas como dicen algunos mayores. Tuve antepasados por estas tierras, y algún amigo y blogero veterano, del que siento su ausencia y silencio. Toda la sierra de Alcaraz me llama y me entusiasma, el verde y el rojo de sus tierras y esta orgía de agua y naturaleza que se concentra entre pinos y riscos.
     Cae el agua a chorros, revienta, explota...así me siento yo a veces, con ganas de reventar, de explotar, aunque después del torrente vienen las aguas calmas o no, nunca se sabe. Lo importante es que el agua limpia y purifica, y arrastra lodos y suciedades.
   A chorros quiero, y a chorros odio. Soy así de exaltado. Como las cascadas de este nuestro Niágara particular. Uno de los más impresionantes espectáculos y sensaciones.
          Y fuera sigue lloviendo, sin tregua, sin descanso. Estos meses parecemos una ciudad del norte. Mejor así, que nos deje una semana santa de cielos azules y soles radiantes. En dos semanas, palmas y tambores, y una nueva ilusión, una nueva vivencia.

    Nos vemos en Riópar, que hasta cuando hay sequía es bonito. Feliz lunes, feliz semana, feliz vivir!