miércoles, 30 de enero de 2013

EMPANADILLAS

Pero caseras. Con el relleno hecho en casa, con abundante tomate y atún. Puede que algún guisante y algo de huevo cocido también jeje Plato de las semanas santas de vigilias y potajes, y segundo plato de muchas semanas de aquellas en que era escolar, y al llegar a casa me daban a probar el relleno hecho en plato de porcelana, que esperaba llenar las finas obleas, que después de ser cerradas con los dientes del tenedor, formando la característica forma de abanico, serían presas del dorado aceite, donde se convertirían en tan delicioso bocado.
    Soy más de estas empanadillas que de las empanadas. Que también, otro día les haremos el post gastronómico. Pero nada nada de las congeladas de findus, pescanovas y esas cosas que me saben todas a plástico y a nada, y para el estómago siempre es necesario tener con sabor y que llene, que se sienta. Como el amor ese que dicen que se manifiesta en mariposas revoloteadoras...
     Un día de estos las voy a hacer. Espero que no se me quemen como las famosas de Móstoles. Y tampoco quedarme empanado, que bastante lo estoy a veces, que parezco un merluzo, aunque de merluza son las croquetas ¿no? Pues eso, que he decidido hacer propósito de enmienda y voy a ver si aumento mi escueta carta de autogastronomía, entre otras cosas, que ya nos hemos comido casi un mes del 2.013 y para lo que hemos avanzando, pues habrá que pensar en algo.


        Mi blog lleva unos días con poco movimiento...¿donde están mis templetilleros fieles? si ya os aburro, se dice y se cierra la persiana, que la crisis es general por lo que veo, y para este espacio de lecturas e intercambios de palabras, lo peor es la ausencia de las mismas, y ya lo hice una vez. Animaros, animarme, gracias, besicos.
     

9 comentarios:

  1. Que buena pinta esas empanadillicas, mi familia las hace muy parecidas :) debe ser el aire manchego...
    Has llegado a probar las que doy en Semana Santa?? aunque bueno, con esto de la crisis el año pasado ya no di y este creo que tampoco jeje, aunque si vienes tu las hago solo para ti :) que poca gente mas se lo merece

    animate ojitos y ni se te ocurra cerrar esto

    Lady submarino

    ResponderEliminar
  2. ¿Donde estas esa ausencia? ¡yo! no falto ni un solo día.
    Mi recuerdo y cariño a esas empanadillas de niño que salían de manos de mi Abuela Rafaela y de mi Madre Luisita... Buenissiiiimasssss......
    Recuerdo su maza y su finas capas de obleas (maza) que es lo que siempre le hemos llamado. je je je...
    ¡La verdad, sea dicha que como las caseas nada de las precocinadas, aunque muchas veces nos hacen un gran favor esos supe congelados.
    Recuerdo a esas empanadillas de Móstoles y sus creadores y esa Encarna empanadillera.
    El mes llega a su últimos días y no adentra en los primeros día de febrero, mes de la Candelaria, Carnavales y principio de Cuaresma.
    Ya se nos acerca la preciadas horas de penitencia y disfrute emocional y artístico.
    Lo bueno del carnaval, es!... que llega la Santa y Bendita Cuaresma y su Semana Santa.....
    Como siempre digo...
    ¡Estamos deseando que nazca, para matarlo!.

    Que jodidos, que somos....


    ResponderEliminar
  3. me apunto a las empanadillas caseras made in temple.. esta semana está siendo intensa y no me ha dado tiempo ni a comentarte apenas, pero tu sabes q soy fiel a tus palabras.. feliz día..

    ResponderEliminar
  4. Muy ricas, pero las caseras de toda la vida, esas que se cierran con el tenedor.....en tiempos de semana santa son un plato recurrente, aunque yo las como todo el año, hay algunas marcas congeladas que estan conseguidas y te sacan del apuro si vas mal de tiempo, ea y to eso te puedo contar.....
    La Polo

    ResponderEliminar
  5. Hijo, con eso de que todas llevan huevo duro (ay, qué manía tiene la gente de echarle huevo duro a todo, qué cruz)solo me como las caseras... y como no las hago, pues ni te cuento el tiempo que hace que no me echo una empanadilla p´al cuerpo.

    ResponderEliminar
  6. Yo sí he estado ausente. Acabo de llegar de la histórica, encantadora, gastronómica y gélida Granada, de cerrar la delegación de allí. Ya hacía tiempo que querían cerrarla... y se acabó. Estoy de bajón, por los compañeros de allí, que los más han sido reubicados pero 2 han ido a la puta calle. Por las 7 horas de tren de vuelta a Valencia y porque, a pesar del mal rollo que genera cerrar una oficina, decidimos salir y cenar y tomarnos unas copillas y que la vida no nos amargue...y así estoy hoy. Dicen que el cerebro, después de muchas horas de trabajar, salir, beber y no dormir lo suficiente empieza a desconectar zonas para "ahorrar energía". El mío hoy solo tiene funcionando la zona dedicada a respirar porque estoy más empaná que tus empanadillas. Eso sí, me he puesto morá de PIONONOS ¡Qué cosa más buena!
    un B7

    ResponderEliminar
  7. En mi casa las empanadillas le gustan mucho a mi madre, pero claro, tampoco le hace mucho tilín el huevo!! Yo soy más del pastel de carne murciano, con sesos, sin sesos o como sea... y eso sí, una cervecica fresca (aún en invierno) y unas olivicas parías!! Mira, se me están poniendo los pelos como escarpias y la saliva se me va cayendo ya!! Jajajaj. Muchos besicos pa tós!! Gúmer.

    ResponderEliminar
  8. Yo no tengo tiempo de ná, estoy mas liao que la pata de un romano, pero desde el movil te leo, aunque con estos peaso dedos no me es facil responder na de na en el selular.

    ResponderEliminar
  9. Aqui hay un Templetillero fiel.Un forofo ''der figura'',..un incondiconal.Y.......me tocaste la fibra cos estas suculentas empanadillas,que a juzgar por su color,..estan fritas en su punto,...un poquito pasadas,como me gustan a mi.Ya sabes que me debes una tapaza y una cerveza,..aunque empanadas de atun sean.

    ResponderEliminar