Tres veces ya en este lugar, que me llena de paz, de sosiego. Donde encuentro el maridaje de mi devoción a esta imagen pequeña ,y la asombrosa naturaleza que la envuelve. Tal vez Covadonga y la Peña de Francia me invitan a semejantes sensaciones. Y me gustaría venir algún domingo de abril a ver estas laderas llenas de estandarte, banderolas y vítores, o alguna madrugada de agosto a ver la Señóra rodeada de nardos en la más bella celebración nocturna de estos lares.
La niebla de esta mañana daba un aire más familiar, mas sugerente. Pronto se abrió el sol y todo el esplendor se mostró ante nosotros. Rato de relax en la remozada hospedería donde no descarto pasar algún fin de semana de retiro espiritual, gastronómico y personal, si alguien se apunta...
Segundo día del doce por tierras del Santo Reino, en esta provincia hermana, un poco olvidada, pero impresionante. Y mirando la carita de niña aceitunada de la Reina de Sierra Morena, entre leyendas de bandoleros, pastores y milagros, como el que se hace cada día en un nuevo amanecer, en una nueva emoción...y salud para todos.
¡Viva la Virgen de la Cabeza!
Estás que no paras....a ver si con este viaje vienes más relajado....
ResponderEliminarEspero que te lo estés pasando bien, ya nos vemos cuando vengas...y espero que tengas razón y la Virgen de la Cabeza nos de salud...que falta me hace....jjjjj
Besos
La Polo
Llevo retraso templetillero desde el año pasado. Me voy a pegar un chute de los blogs tan hermosos. Espero que este año sea para tí más alegre. Yo me he propuesto ver las cosas de colores a ver si así, al menos, alcanzan el tono pastel. Un besazo
ResponderEliminarMeriyo
Retrato fiel el que has hecho de una mañana de niebla en el Cerro del Cabezo, lo viví yo un domingo de hace unos cuantos años y presenta un aspecto único.
ResponderEliminar¿Qué tendrá esta imagen de la Virgen que a tantos enamora y tantos corazones cautiva? El chocolatín del Cielo, la Reina de Sierra Morena, nuestra aceituna bendita... Miles de piropos para una Gran Señora, como lo es la Virgen María, Madre de Dios y Madre de la humanidad, encerrada en su más pura ensencia en una pequeña imagen que allá en 1944 tallara Navas Parejo a semejanza de aquella que espera y ve pasar el paso de los años escondida en algún recóndito escondrijo de la espléndida Sierra Morena, donde el Capitán Cortés (según se cuenta) la depositó para evitar su profanación cuando el entonces Santuario a secas, hoy Basílica iba a ser objeto de las iras de algunos.
Yo nunca he vivido la romería, la he visto siempre por televisión, pero tiene que ser muy grande. Estuve hace un par de años cuando la Virgen fue trasladada a la ciudad de Jaén y aquello fue inolvidable, son de esas cosas que marcan los sentidos y de las que impresionan la memoria.
Me alegro hayas pasado unos días agradables en mi tierra y que vuelvas, porque digan lo que digan, de Despeñaperros pa' bajo, hasta se respira mejor.
Un abrazo.
Precioso comentario e impresión sobre el emotivo retrato que nos estás mostrando. La fotografía dice mucho del lugar mágico donde reina la Madre de Dios, pero también dice mucho de la persona que lo ha retratado y lo comenta... debes tener un corazón tan grande que seguro que no importa que puedas asistir a su Romería, ya que Ella está siempre en tí, un fuerte abrazo amigo.
EliminarGracias Manu por tus palabras, espero leerte por aquí con asiduidad. Un abrazo
ResponderEliminarQue bonita pagina, pero más impresionante son los articulo espuestos. Estan cargados de un sentimiento y profundidad asombrante. No conocia yo esta tu faceta de poeta y articulista. Como dicen por mi pueblo: "vales para un roto y un descosio". Animo y sigue así, de un hermano que te aprecia mucho.
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