lunes, 2 de junio de 2014

QUE RÍE LLORANDO

Dice la copla que cantaba la Jurado, que ayer hizo ocho años que se marchó con su voz magistral y prodigiosa. La Macarena, la virgen sevillana de diciembre y abril, se hizo reina del mes de mayo con corona de aplausos, vivas y amores.
   Ella, que es Esperanza de Sevilla y del mundo, y que según como tú la mires, te mira, como dice otra canción, es uno de mis referentes, de mis devociones y diría de mis debilidades.
    La he tenido más de media hora de perfil, enfrente de mi y eso es algo que es muy difícil de explicar, cuando siempre la he contemplado de frente, con su cara tan bella y su majestad. Este fin de semana, Sevilla ha sido más universal, y gentes de todas partes hemos sido peregrinos y caminantes, en busca de ese itinerario por el que ha discurrido el palio con más luz  que pueda existir. La muchedumbre, miles de personas, millones de pensamientos, de sentimientos, de peticiones y de oraciones, la han escoltado, acompañado, acariciado sin tocarla. La Macarena es un lágrima que ríe, es una sonrisa que llora. Cabe en su mirada todo, y su mirada cabe en mi corazón, en nuestros corazones.
    Junio ha entrado en mi con el cielo sevillano. La ciudad soñada y siempre anhelada. Y lleno de esperanzas, de la Esperanza, porque su mirada me ha dicho, me ha aconsejado, me ha consolado y me ha reconfortado.
       Macarena y Esperanza. Y ya está todo dicho.
   

5 comentarios:

  1. Su Esperanza, es nuestro caminar diario.
    Chao.

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  2. Ea, media hora delante de una Virgen no lo hace cualquiera. Solo algunos con devoción tan grande como la tuya. Claro que hay quien elige otras cosas que mirar durante horas y son bastante menos inspiradoras.
    Si te llena de consuelo y te reconforta, pues "ya está todo dicho".
    Besos y buen día.

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  3. Joaquín Martínez2 de junio de 2014, 9:44

    Sale de la Catedral besando los claveles blancos el dintel de la puerta, la Esperanza, la esperanza de sevillanos y foráneos, de propios y extraños, la esperanza de un barrio, la Esperanza. No había una campana en la Giralda que no sonó y gritó a los cuatro vientos un Ave María. Esperanza, Macarena. Sentimiento hecho obra, la madera hecha unción y en la unción la Madre del Señor. Gracias por permitirme haber vivido esta experiencia, gracias por pasar tan cerca de nosotros esa mañana, gracias por poderte mirarte a los ojos tanto tiempo, gracias por el brillo del sol en aquella lágrima. Gracias.

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  4. No pierdas nunca la esperanza. Esperanza ... es el refugio cuando no se ve solución, es la luz cuando está todo oscuro. ... Esperanza es lo que queda cuando todo lo demás falla. Lo que hace levantarse cuando todo fracasa y seguir a por algo mejor.
    Me alegro que vengas con Esperanza.

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